Acabo de experimentar el desprecio de algunos grupos y en lugar de sentirme decepcionado, me alegro un montón de no contribuir a un arte ramplón y neocateto. Algunos pensarán que estoy furioso, pero no. Creerme por que me encanta expulsar de mi vista arte que no se compromete con los tiempos difíciles que nos tocan de vivir ahora. Cualquier hijo de ricacho inútil puede dedicarse al arte, por que no puede hacerlo en la física cuántica. Lo que mas me fastidia es que por todos los medios intentan imponer sus criterios aberrantes. Pues con este, con Joaquin Abella, no podéis ni ahora ni nunca.
Y que quede claro, el artista no se hace. Tu madre te pare con talento o no. Y eso vuestro dinero no puede comprarlo. Así que por mas que intentéis joder a los artistas perdéis el tiempo. Sois carne de olvido.